Cortarle las uñas a un gato reguralmente es parte vital del mantenimiento y la higiene del animal. Ello no solo protege la salud de las personas que manipulan al gato, sino que también garantiza el buen estado de los sofás. Pero si lo atemoriza la idea de cortarle las uñas al gato, sepa que lo único que esto requiere es un poco de paciencia.
Podemos optar por una solución algo más inteligente y más práctica de cara a nuestra mascota.
Tratar los problemas de comportamiento desde que son cachorros, enseñarles donde pueden arañar siempre que quieran (ponerles rascadores verticales y horizontales, torres de juego, etc…) y cuando lo utilicen premiarles para que asocien el gesto con algo grato para ellos como por ejemplo: darles unas bolitas de pienso, ofrecerles una zona exclusiva para sus juegos y por supuesto tener en cuenta que los gatos castrados en su tiempo adecuado que viene a ser entre los 7 y 9 meses de edad como máximo, son menos proclives a que marquen irremediablemente donde quieran y sientan la necesidad de marcharse de casa por la época del celo.
Cuando el gato se siente seguro en su entorno, frota su cabeza dejando las superficies impregnadas de una sustancia llamada feromona facial, que le permite identificar ese entorno como familiar, de bienestar y calma. Existe un producto denominado feliway el cual simula el olor de las feromonas faciales del gato de forma que ayudan a estabilizar el comportamiento del animal y reducen el marcaje.
Si el gato suele arañar en zonas concretas podemos utilizar repelentes especialmente diseñados para mascotas, que nos ayudaran a disuadirlos sin que sean nocivos para su salud.
Corte de uñas
Si usted se acerca al gato con un objeto afilado en una mano mientras trata de cogerle la pata con la otra, lo más probable es que usted quede con las manos vacías. Debido a que el temperamento y disposición delos gatos es muy variable, no hay una manera perfecta de manipularlos mientras se le cortan las uñas . Algunos gatos permanecen tranquilos sin control de ninguna naturaleza, pero la mayoría necesitan ser sujetados firmemente, pero con delicadeza, para asegurar que nadie salga lastimado. Trate de sostener el gato bajo un brazo mientras sostiene una pata con la otra mano . O ponga el gato en una mesa de examinar y sostenga una pata a la vez. Incluso podría ser capaz de convencer a un gato particularmente sociable, de echarse en su regazo.
Si tiene un ayudante, pídale que sostenga el gato mientras usted le corta las uñas, o solo pídale que le acaricie la nariz u ofrézcale un pasabocas especial. Si tiene dificultad para cortarle las uñas traseras, trate de sostener el gato suavemente por el cuello y acuéstelo de lado, luego pídale a alguien que le corte las uñas.
Ahora que usted y el gato están en posición, también ponga la uña en la posición correcta. Tome una pata en su mano, empuñe sus dedos y use su pulgar para presionar suavemente la articulación justo arriba de la uña. Cuando la uña se extienda, corte rápida pero cuidadosamente tan solo el borde afilado.
Así como la parte rosada de las uñas de los humanos, la raíz es muy sensible. Cortar dentro de esta área puede probablemente herir al animal y causarle sangrado. Si esto pasa haga unpoco de presión en la punta de la uña (Sin presionar toda la pata, lo cual solo aumentaría el flujo sanguíneo) o introduzca la uña en unpoco de polvo antiséptico, luego suelte el gato, asegurándose de revisarlo ocasionalmente.
Nota: Cuando este cortando las uñas de un gato de pelo largo, asegurese que el pelaje está alejado del cortauñas, sino puede halar el pelaje del animal causándole dolor al gato y minimizando su chance de otravez cortarle las uñas.
Si usted no es capaz de cortar las 20 uñas a la vez, no se preocupe. Pocos gatos permanecen tranquilos por más de unos pocos minutos, así que tome las que pueda, elogie al animal por cooperar, luego aproveche la siguiente oportunidad -de pronto la siesta del animal- para cortarle las uñas.
Se puede realizar un corte periódico de la punta de las uñas del gato teniendo cuidado de no cortar la venita que esta dentro de la uña. Si no nos damos cuenta y cortamos la venita, existen productos para parar la hemorragia como el polvo estíptico. Los gatos se acostumbran con facilidad a que le corten las uñas si lo hacemos desde pequeños, aunque si nuestro gato no se deja cortar las uñas podemos acudir al veterinario.
Este proceso tendremos que hacerlo cada vez que lo necesite el gato, que suele ser cada una o dos semanas.
Estas medidas harán que aumente la calidad de vida de nuestra mascota y por supuesto nos ahorraremos en problemas de cara a la salud del gato.
